171 182. A quienes desmientan Mis signos los degradaré paulatinamente sin que puedan darse cuenta. 183. Los toleraré temporalmente [hasta el Día del Juicio], puesto que Mi castigo es una promesa firme. 184. ¿Acaso no se dieron cuenta de que su Mensajero no es un demente? Él es un claro amonestador. 185. ¿Acaso no reflexionaron en el reino de los cielos y de la Tierra y lo que Dios creó en él, ni tampoco en que el final de sus vidas pudiere estar próximo? Si no creen en este Mensaje, ¿en qué otro iban a creer? 186. A quien Dios extravía nadie lo podrá guiar. A éstos Dios los deja que actúen desorientados en su ceguera. 187. Te preguntan cuándo llegará la Hora [del Día de la Resurrección]. Diles: “Solo mi Señor lo sabe, y nadie salvo Él hará que comience en el momento decretado36. Los cielos y la Tierra temen su llegada. Cuando llegue los sorprenderá”. Te preguntan como si supieras [cuándo ocurrirá]. Diles: “Su conocimiento solo Le pertenece a Dios, pero la mayoría de la gente no lo sabe”. 188. Diles [oh, Mujámmad]: “No poseo ningún poder para beneficiarme ni perjudicarme a mí mismo, salvo lo que Dios quiera. Si tuviera conocimiento de lo oculto tendría abundantes bienes materiales y no me alcanzaría nunca un mal. Yo solo soy un amonestador y albriciador para la gente que cree”. 189. Él es Quien los creó a partir de un solo ser37, del cual hizo surgir a su cónyuge38 para que encontrara en ella sosiego. Y cuando se unió a ella, quedó embarazada y llevó en su vientre una carga 36 Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, fue preguntado acerca de la Hora y respondió: “El que está siendo preguntado no sabe acerca de ella más de lo que sabe el que pregunta”. El que estaba preguntando era el ángel Gabriel, que se presentó ante él en forma humana. Si el más noble de los ángeles y el más noble ser humano, Mujámmad, no sabían cuándo iba a llegar el final del mundo, entonces está claro que ninguna persona ni criatura sabe cuándo ocurrirá. Este punto nos brinda una prueba importante acerca de la falsedad de la creencia en la divinidad de Jesús, porque él mismo afirmó no conocer cuándo llegará la Hora y que solo Dios conoce su tiempo: “Pero de aquel día y de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre” (Marcos 13:32). Ver también en La Biblia, Mateo 24:36. 37 Adán, el primer hombre creado. 38 Eva, la primera mujer creada. Capítulo 7 Los Lugares Elevados • El Corán (traducción comentada)
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