El Boletin Islamico Edicion Numero 4

Un latino de cuarenta y dos años de edad, Raphael, es un cómico y conferencista con sede en Los Ángeles. Nació en Texas donde asistió a su primera reunión de Testigos de Jehová a los seis años. Dio su primer sermón Bíblico a los ocho años, atendió a su propia congregación a los veinte y se dirigió a una posición de liderazgo entre los 904.000 Testigos de Jehová en los Estados Unidos. Pero cambió suBiblia por unCorándespués dehaber visitadounamezquita local. El 1 de noviembre de 1991, abrazó el Islam, llevando a la comunidad musulmana las habilidades de organización y del habla que desarrollóentre losTestigosde Jehová. Él habla con laurgenciadeunnuevoconverso, perounoquepuedehacer que los inmigrantesmusulmanes se ríande símismos. Él contó su historia imitando a un elenco de personajes. Recuerdo vivamente haber estado en una discusión en la que todos estábamos sentados en la sala de estar de mis padres y allí había otros Testigos de Jehová. Estaban hablando de: "¡Es Armagedón! ¡El momento del fin! Y ¡Cristo viene! Y ya sabes, ¡que granizos tan grandes como los coches van a estar aquí! ¡Dios va a usar todo tipo de cosas para destruir este sistema malvado y quitar los gobiernos! ¡Y la Biblia habla de la apertura de la tierra! ¡Va a tragar cuadras enteras!" ¡Tengo miedo! Y entonces mi madre se dio la vuelta: "¿Ves lo que te va a suceder si no te bautizan, y si no haces la voluntad de Dios? La tierra te va a tragar, o uno de estos grandes granizos te va a golpear en la cabeza [klonk], te derribara, y no existirás nunca más. Tendré que hacer otro hijo.” No iba a arriesgarme a ser golpeado por una de esas grandes piedras de granizo. Así que me bautizaron. Y por supuesto los testigos de Jehová no creen en la aspersión del agua. Te sumergen por completo, te mantienen allí por un segundo, y luego te sacan. Lo hice a la edad de trece años, 7 de septiembre de 1963, en Pasadena, California, en el Rose Bowl. Fue una gran asamblea internacional. Teníamos 100.000 personas. Condujimos todo el camino desde Lubbock, Texas. Eventualmente comencé a dar charlas más largas - diez minutos delante de la congregación. Yun sirviente del circuitome recomendódar las conferencias de 1 hora que se hacen el domingo cuando invitan al público en general. Ellos usualmente, reservabanesos[sermones]paralosmásmayoresdelacongregación. [En una voz autoritaria:] "Seguro que es joven. Pero puede manejarlo. Es un buen chico cristiano. Él no tiene vicios, y es obediente a sus padres y parece tener bastante conocimiento de la Biblia." Así que a la edad de dieciséis comencé a dar conferencias de horas delante de congregaciones enteras. Fui asignado primero a un grupo en Sweetwater, Texas, y luego, eventualmente, en Brownfield, Texas, tuve mi primera congregación. A los veinte años, me había convertido en lo que ellos llaman un ministro pionero. Los Testigos de Jehová tienen un programa de entrenamiento muy sofisticado, y también tienen un sistema de cuotas. Tienes que dedicar de diez a doce horas al mes a la predicación puerta a puerta. Es como la gestión de ventas. IBM no tiene nada sobre estos tipos. Así que cuando me convertí en unministro pionero, dediqué la mayor parte de mi tiempo a hacer el ministerio puerta a puerta. Tuve que hacer como 100 horas al mes, y tuve que tener siete estudios Bíblicos. Empecé a dar conferencias a otras congregaciones. Comencé a tener mucha responsabilidad y fui aceptado en una escuela en Brooklyn, Nueva York, una escuela muy elite que los Testigos de Jehová tienen para la crema y nata, el uno por ciento superior. Pero yo no fui. Algunas cosas ya no tenían sentido para mí. Por ejemplo, el sistema de cuotas. Parecía que cada vez que quería dar vuelta a una esquina y llegar a otra posición de responsabilidad, tenía que hacer estas cosas materiales seculares para probar mi santidad. Es como si cumples tus cuotas este mes, Dios te ama. Si no cumples tus cuotas el mes que viene, Dios no te amará. Eso no tenía mucho sentido. ¿Un mes Diosme amayotrono lohace? nadie más, porque todos practican falsas religiones. Bueno, pensé, la Madre Teresa es católica. Ese es nuestro terrible enemigo. Así que dije, "Espera un minuto, la Madre Teresa ha pasado toda su vida haciendo cosas que Jesús dijo: cuidar a los pobres, a los enfermos, a los huérfanos. Pero, ¿no va a recibir el favor de Dios porque es católica? Criticamos a la Iglesia Católica porque tenían un hombre, un sacerdote, a quien tenían que confesar. Y decíamos, "¡No tienes que dirigirte a un hombre para confesar tus pecados! ¡Tú pecado es contra Dios!" Y sin embargo vamos a un grupo de Ancianos. Confesaste tus pecados y te pusieron en espera, y dijo [anciano como operador de teléfono:] "Espera un minuto... ¿Qué piensas, Señor? ¿No? ... Bueno, lo siento, lo hemos intentado lo mejor que hemos podido, pero no estas lo suficientemente arrepentido. Tu pecado es demasiado grande, así que pierdes tu fraternidad en la iglesia ovas a estar a prueba.” Si el pecado es contra Dios, ¿no debo acudir directamente a Dios y pedirle misericordia? Probablemente el clavo que golpeó el ataúd fue que me di cuenta de que comenzaron a leer menos la Biblia. Los testigos de Jehová tienen libros para todo lo que es publicado por la Biblia Atalaya y la sociedad publicitaria. Las únicas personas en el todo el planeta que saben interpretar correctamente las Escrituras Bíblicas es ese grupo de hombres, ese comité en Brooklyn, que dice a los testigos de Jehová en todo el mundo cómo vestirse, cómo hablar, qué decir, qué no decir, cómo aplicar las Escrituras y como va a ser el futuro. Dios les dijo, para que puedan decirnos. Aprecié los libros. Pero si la Biblia es el libro de conocimiento y si son las instrucciones de Dios, entonces, ¿no deberíamos obtener nuestras respuestas de la Biblia? El mismo Pablo dijo descubre por ti mismo cual es la verdadera y aceptable palabra deDios. No dejes que los hombres hagan cosquillas en tus oídos. Comencé diciendo, "No te preocupes tanto por lo que dice Watchtower - lee la Biblia por ti mismo." Las orejas comenzaron a pinchar. [Susurro del viejo sureño:] Creo que aquí tenemos un apóstata, Juez. Sip. Creo que el taco de este viejo es corto de algo. Incluso mi padre dijo, "Es mejor que lo veas, jovencito, eso son los demonios hablandoahímismo.Esossonlosdemoniostratandodeentrarycausardivisión." Le dije, "Papá, no son los demonios. La gente no necesita leer tanto de estas otras publicaciones.PuedenencontrarsusrespuestasconlaoraciónyenlaBiblia." Espiritualmente ya no me sentía a gusto. Así que en 1979, sabiendo que no podía avanzar, me fui, descontento y conmal gusto en la boca, porque todami vida había puestomi alma, mi corazón, mimente en la iglesia. Ese fue el problema. No lo puse enDios. La puse enuna organizaciónhecha por el hombre. No puedo ir a otras religiones. Como Testigo de Jehová, había sido entrenado, a través de las Escrituras, para mostrar que todos estaban equivocados. Esa idolatría es mala. La Trinidad no existe. Soy como un hombre sin religión. Yo no era un hombre sin Dios. Pero, ¿dónde podría ir? En 1985, decidí venir a Los Ángeles y entrar en el espectáculo de Johnny Carson y hacer mi marca como un gran comediante y actor. Siempre me he sentido como si hubiera nacido para algo. No sabía si iba a encontrar la cura para el cáncer o convertirme en actor. Seguí rezando y se puso frustrante después de un tiempo. Así que fui a la iglesia católica cerca de mi casa, y la probé. Recuerdo que el Miércoles de Ceniza tuve esa cruz de cenizas en mi frente. Intentaba todo lo que podía. Fui por cerca de dos o tres meses, y solo no podría hacerlo más, hombre. Fue: Levántate. Siéntate. Levántate. Siéntate. Ok, saca la lengua. Hice bastante ejercicio. Creo que perdí cerca de cinco libras. Pero de eso se trata. Así que ahora estoy más perdido que nunca. Pero nunca pasó por mi mente que no hay un Creador. Tengo Su número de teléfono, pero la línea siempre está ocupada. Estoy haciendomis pequeñas películas. Una película llamada Intención Mortal. Un comercial telefónico en Chicago. Un comercial de Exxon. Un par de comerciales bancarios. Mientras tanto estoy haciendo trabajos de construcción por otro lado. Estamos trabajando en este centro comercial. Es la temporada de vacaciones, y ponen estas cabinas extra en los corredores. Había una chica de nuestra edad, y tuvimos que pasar justo delante de ella. Yo dije, "Buenos días, ¿cómo estás?" Si ella dijo algo, fue "Hola". Y eso fue todo. Finalmente, le dije, "Señorita, nunca dices nada. Sólo quería disculparme si había algo que dije mal." Ella dijo: "No, ya ves, yo soy musulmana." "¿Tú eres qué?" "Soy musulmana, y las mujeres musulmanas, no hablamos con los hombres a menos que tengamos algo específico para hablar; de lo contrario no tenemos nada que ver con los hombres." Cómo abracé el Islam Página 12 El Boletín Islámico

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